Mientras El Zaguán recibía a perfectos pecadores, El Abuelo se preparaba y probaba sonido. Se notaba que las ganas de empezar con ese rock, SU rock… bien “nacional”, bien “loco” no podía esperar más. Ese rock, que según ellos “No tiene sentido” pero explota como “Bomba”, era garra, locura, agite, fuerza, y toda la potencia de una banda que la viene peleando de abajo. Porque El Abuelo trabaja. Se calza el overol, sombrero negro y a tocar. Hasta se hace el humilde, “no somos artistas, somos trabajadores de la música”, dice "Pollo", voz de El Abuelo. Dejame decirte entonces, ¡qué buen laburo que hacés!

Los chicos de "El Abuelo"
Y algo que sorprendió -para los que nunca lo habían visto- fue ese saludo "futbolero", esa unión en la banda arriba del escenario, esa armonía que transmiten, y muestran que son un grupo bien formado. Los abuelos se pasaron –de mano en mano- toda la energía. Esa energía, que entre letra y melodía, nos hace olvidar de todo, y sólo sentir puros rockanroles. Todos los nietos ahí presentes escuchamos atónitos temas como “La Batalla Macabra”, “Pozo Ciego”, “Como una Gorgona”, “Rock Nacional”, “La Ira de Pierrot”, “Lúdica”, “Febrero”, “Púas”, “No Tiene Sentido”, “Tu Rock Loco”, "Hipólito”, y un final –que hizo explotar todo El Zaguán- “Bomba”.
Cada abuelo pone mucho de lo suyo y de esa mezcla logran ese rock que eriza la piel. La batería, las guitarras, el bajo, la voz… y una peculiaridad, un violín pero en manos de una abuela, Agustina. Como vienen las mujeres, a paso firme en el rock under, imponiéndose despacio y de a poco, y dándole a la banda ese toque de distinción.
Luego fue el turno de La Herida. Una banda consolidada en su formación desde el 2004. Como siempre deja todo en cada presentación, en cada fecha, y El Zaguán no fue la excepción. Con esa onda bien arriba del “Chipy” en voz, con toda la música y ritmo de sus integrantes, y la particularidad de "la negra" que los distingue en la percusión, La Herida deslumbró.

Los chicos de la Herida.
Durante una hora pudimos apreciar "Atrapada en tu mundo", "Llevame", "La Vela", "El odio del destino", "Tu mentira", "El Alma", "Vuelvo a caer", "Los cuervos", "El lado que mata", "Huellas", "Andando un cachito".
Máximo momento fue "Desorbitado". La fiesta estaba a pleno, todos los pecadores haciendo palmas y acompañando a la banda con ese inconfundible estribillo "esta noche quiero ver... tu culo en mi cadera quiero ver". Todos estaban como locos… sólo había que disfrutarlo. Porque esta herida queda en tu cuerpo, en tu memoria, es una marca copada en tu vida. Es una herida que “sangra a puro rock” y el rock es así… infinito!

Perfectos pecadores en el Zaguán.
Pero La Herida no se cierra, sigue el próximo viernes 27 de abril en el Teatro Verdi, junto a El Abuelo, en una noche que promete rock de a montones. Como siempre, el rock vive!
EL CONVENTILLO
Viernes 20 hs.
FM La Boca 90.1
http://www.fmelconventillo.blogspot.com
buenisima la nota!
ResponderEliminarsaludos, Dani de Lanus
la verdad q el abuelo se paso
ResponderEliminarmuy linda la nota
saludos
laura
alguien sabe kuanto esta la entrada? porke no dice en ninguna parte
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